La creación de empleo se acelera (3,29%), pero la tasa de paro crece hasta el 21%
• Cae la ocupación en el primer trimestre en 64.600 personas, aunque crece el empleo público (+17.600) en el mismo período
La Encuesta de Población Activa (EPA) del primer trimestre ha lanzado señales contrapuestas sobre la evolución del mercado de trabajo. Por una parte, ha reflejado una reducción intertrimestral de la ocupación de 64.600 personas, lo que supone el mejor comportamiento de la ocupación en un primer trimestre desde 2007 y este hecho ha servido para elevar el ritmo de crecimiento anual del empleo -un 3,29%, tres décimas más que en el último trimestre de 2015-, pero no corresponde a un comportamiento habitual en dicho trimestre en los años previos a la crisis, en los que de manera sistemática crecía el empleo. La cifra de ocupados ha quedado situada en 18,03 millones.
Por otra parte, el desempleo ha crecido en el primer trimestre, lo que no pasó en los dos años anteriores. Como consecuencia, la tasa de paro ha crecido ligeramente, hasta el 21,0%, una décima más que en el trimestre previo. El número de parados ha quedado situado en 4,79 millones de personas.
En cuanto a la evolución de la actividad, la población activa ha seguido reduciéndose en el primer trimestre, con una disminución de 52.700 personas y una caída de la tasa de actividad hasta el 59,42%, 0,12 puntos menos que en el trimestre anterior y 0,16 menos que hace un año.
Pese a la caída trimestral de la ocupación, crece el empleo indefinido y aumentan los ocupados en el sector público
La caída en número de ocupados en el primer trimestre del año (64.600 personas, -0,36%) se ha producido con la misma intensidad entre los trabajadores por cuenta propia (-10.900, -0,35%) que entre los trabajadores asalariados (-53.600, -0,36%). Pero esta aparente homogeneidad en la reducción trimestral del empleo no se verifica cuando se profundiza en los diferentes grupos de trabajadores ocupados, tanto por cuenta propia como ajena. Así, dentro de los trabajadores por cuenta propia, el primer trimestre ha sido testigo de una fuerte reducción en los empleadores (-23.600, -2,55%), mientras que han crecido los trabajadores por cuenta propia sin asalariados, con 12.700 ocupados más en sus diferentes modalidades. Esta situación, curiosamente, se invierte en términos interanuales, con un crecimiento de 44.900 trabajadores por cuenta propia empleadores (+5,25%) y un descenso entre los que no tienen trabajadores a su cargo.
Entre los trabajadores asalariados, el primer trimestre del año se ha caracterizado por un aumento de los de carácter indefinido (+52.400, +0,47%) y un descenso de los temporales (-106.000, -2,76%). También la situación es muy diferente en la variación anual, pues si bien ambos tipos de asalariados han aumentado, el crecimiento ha sido más intenso entre los temporales (+10,11%) que entre los indefinidos (+1,80%). La tasa de temporalidad desciende siete décimas en el primer trimestre de este año, hasta el 25,0% -lo que indica que 3 de cada 4 trabajadores asalariados en España cuentan con un contrato indefinido-, mientras que en el último año ha aumentado en 1,4 puntos.
La pérdida de ocupados en el primer trimestre del año sólo se ha producido en el sector privado (-82.100, -0,54%), ya que el empleo en el sector público ha aumentado en 17.600 personas, hasta los 3,02 millones. En términos interanuales crecen ambos tipos de empleo: 2,08% en el sector público y 3,54% en el sector privado.
El comportamiento por edades de la ocupación no ha sido homogéneo en el primer trimestre: mientras que se han producido crecimientos del empleo entre los ocupados más jóvenes (16-19 años) y en el segmento de mayores de 40 años (con una excepción entre 50 y 54, donde se ha producido un ligero descenso de 0,09%), el grueso de la pérdida trimestral de ocupados se ha localizado entre los 20 y 40 años, donde la caída ha sido de 133.700 ocupados. En términos interanuales el empleo crece en todos los segmentos de edad con la excepción de los trabajadores con edades comprendidas entre 25 y 34 años, donde el empleo desciende en 76.500 ocupados.
Por sectores, el empleo creció en el primer trimestre en la Industria (+18.000, +0,73%) y disminuyó en el resto de sectores: Agricultura (-2.300, -0,30%), Construcción (-26.900, -2,54%) y Servicios (-53.400, -0,39%).
Sólo en cuatro comunidades autónomas (Cataluña, Murcia, País Vasco y Aragón) se han medido incrementos de la ocupación en el primer trimestre del año. Los mayores descensos trimestrales de la ocupación se han producido en Madrid, Comunidad Valenciana y Galicia.
El paro vuelve a crecer y la tasa de paro se sitúa nuevamente en el 21%
El paro medido a través de la EPA ha crecido en 11.900 personas en el primer trimestre del año. En los dos años previos se habían medido descensos del paro en los primeros trimestres del año, por lo que estamos ante un comportamiento aparentemente no muy positivo, aunque la serie desestacionalizada refleja un descenso trimestral del paro de un 2,74%. La cifra total de parados se ha situado en 4.791.400 personas y la tasa de paro se ha elevado una décima, hasta el 21,00%. El número de hogares con todos los miembros activos en paro ha aumentado en 54.300 en el trimestre.
El aumento trimestral del paro sólo ha afectado a los trabajadores de edades intermedias (25-54 años), con un incremento de 37.000 parados, mientras que tanto los jóvenes (-17.400) como los mayores de 54 años (-7.700) han visto descender sus cifras de parados. A pesar del descenso, la tasa de paro de los jóvenes aumenta ligeramente, hasta el 46,50%, debido a la caída más intensa de la población activa joven. En el segmento de 25 a 34 años la tasa de paro crece más de cuatro décimas, hasta el 23,87%. Nuevamente, el comportamiento del paro no ha sido homogéneo geográficamente, con reducciones de dicha variable en 6 comunidades autónomas (Murcia, Canarias, Andalucía, Cataluña, Aragón y País Vasco) y aumentos en el resto.
Análisis Randstad: El empleo creado en el último año ha sido a tiempo completo
En el primer trimestre del año se han producido descensos tanto en el empleo a tiempo completo como a tiempo parcial. Los ocupados a tiempo parcial han disminuido de manera algo más intensa en el trimestre (-12.900, -0,45%), con lo que un total de 2.830.800 personas trabajaban a tiempo parcial al final del primer trimestre. En el caso del empleo a tiempo completo (-51.700, -0,34%), la caída fue menos intensa en el período referido y la cifra de ocupados a tiempo completo se situó en 15.198.800 personas. La tasa de parcialidad se situó en el 15,7% del total de ocupados.
La evolución en el último año es, sin embargo, muy distinta, puesto que en términos netos sólo se ha creado empleo a tiempo completo en términos interanuales, con un incremento de 580.600 ocupados a tiempo completo en dicho período, lo que supone un aumento de un 3,97%, mientras que el empleo a tiempo parcial ha disminuido en el último año, con 5.800 ocupados menos a tiempo parcial (en concreto -0,20%), una caída que ha afectado sólo a las mujeres.
El crecimiento del empleo a tiempo completo en el último año ha sido más intenso entre las mujeres, que han visto incrementarse la cifra de ocupadas a jornada completa en 291.300, lo que supone casi un 5% de crecimiento (4,97%), mientras que los varones a tiempo completo han crecido en 289.300 personas, un 3,30% más. Por tanto, tanto en cifras absolutas como en crecimientos porcentuales la ocupación a tiempo completo ha evolucionado de manera más positiva entre las mujeres.
Destaca el hecho, al analizar la evolución anual del empleo a tiempo parcial que éste haya aumentado entre los hombres, con 37.900 ocupados más de este tipo (+4,98%), mientras que el descenso medido con carácter general ha sido producido por la reducción del empleo a tiempo parcial entre las mujeres.