contenidos más leídos

Hasta hace bien poco, las empresas del sector tax&legal, especialmente los bufetes, tenían una estructura de gestión de personas muy tradicional en la que había poco margen para la mejora y la innovación. Básicamente, las empresas incorporaban a los mejores perfiles de las universidades para desempeñar puestos junior durante un tiempo. De ahí, podían pasar después de unos años a realizar funciones senior y, posteriormente, optar a ser socios de la firma. Es una estructura piramidal, con las particularidades propias de cada empresa, en la que el objetivo de las nuevas incorporaciones era llegar a ser socios. Sin embargo, si el profesional no tenía los conocimientos, las habilidades, la actitud o la capacidad de sacrificio necesarias, acababa marchándose. Por ejemplo, la consultora Obelisk, en su informe Back to the future: Reshaping law firm culture, alerta de que la rotación de personal en firmas de abogados, especialmente con abogados jóvenes, está en su nivel más alto, una tendencia que le cuesta a las 400 principales firmas de abogados globales más de 7.900 millones de euros anuales".

Por todos estos motivos, desde hace algún tiempo, este tipo de empresas está apostando por potenciar la gestión de los recursos humanos intentando romper las estructuras tradicionales y dando a sus empleados lo que están buscando.

En otras palabras, se están abriendo a la innovación en muchas cuestiones relacionadas con el ámbito de los recursos humanos.

El primer aspecto en el que están trabajando es en la fidelización de sus empleados, introduciendo paulatinamente modificaciones para mejorar sus condiciones de trabajo. De hecho, este aspecto, más que una necesidad, es una obligación, en tanto que la generación millennial se va incorporando al mercado de trabajo. Éstos ya no quieren solo un sueldo. Además, buscan conciliación de vida personal y profesional, flexibilidad, autonomía, motivación y eficiencia. Si no lo encuentran en una empresa, no tendrán ningún reparo en irse a otra que les ofrezca mejores condiciones.

En este sentido, la respuesta de las organizaciones está siendo potenciar su bienestar profesional ofreciéndoles una serie de medidas impensables hace unos años en el sector. Por ejemplo, comienza a ser habitual la flexibilidad horaria tanto de entrada como de salida; así como la adopción de medidas de conciliación.

Junto a ello, están organizando periódicamente campañas de promoción de la salud, que incluyen talleres de gestión del estrés, meditación o mindfulness, técnicas de nutrición, bienestar emocional... Además, se intenta promover la realización de actividades físicas en los empleados firmando acuerdos y condiciones especiales para que puedan utilizar los gimnasios próximos a la oficina, o situando salas de ejercicio en sus propias instalaciones, incluyendo servicio de fisioterapia.

Y, por supuesto, también ofrecen medicina del trabajo y prevención de riesgos laborales, técnicas de primeros auxilios, mejora de la salud cardiovascular, apoyo psicológico con líneas de atención telefónica anónimas y confidenciales, etc. Esto es así, porque invertir en bienestar también tiene un gran retorno para las organizaciones. Es más, con unas buenas políticas en esta materia, los bufetes están siendo capaces de atraer el talento, especialmente el de las nuevas generaciones.

Por otro lado, la digitalización también está llegando a este sector que, poco a poco, se va transformando con la ayuda de la tecnología. Y eso también se está dejando sentir en la administración de sus recursos humanos. Por ejemplo, el conocimiento de las herramientas tecnológicas y del análisis de datos son algunas de las competencias que se están fomentando entre las plantillas de estas empresas; además de dejar a un lado las tareas más rutinarias y administrativas para que los empleados puedan centrarse en aquellas que aportan un mayor valor añadido a su trabajo.

Por último, otro de los aspectos en los que también está innovando el sector tax&legal en la gestión de personas es en su desarrollo profesional. Cada vez más empresas apuestan por la formación continua como una de sus prioridades fundamentales para fomentar su crecimiento profesional y personal. Para ello, realizan formaciones internas de carácter técnico y en idiomas, además de financiar cualquier tipo de formación vinculada con el área de especialidad a la que se dedique el empleado.

Al final, de lo que se trata es de romper con una estructura tradicional que hacía más difícil atraer y fidelizar al mejor talento, y dar opciones a los empleados para que no solo sigan en la empresa, sino que también lo hagan con el mayor compromiso posible.

¿Necesitar profesionales del sector legal para potenciar tu negocio? En Randstad, ¡te ayudamos!