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Motivar en el trabajo

Tiempo de lectura: 5 minutos.

¿Qué es la motivación?

La motivación es la causa del movimiento, aquello que nos hace avanzar hacia un objetivo con la promesa de mejorar, de satisfacer una necesidad. Se trata de un proceso interno que activa, dirige y perpetúa una conducta. No obstante, existen elementos externos que pueden influir sobre ella, como pueden ser:

  • Baja remuneración económica.
  • Ausencia de objetivos.
  • Falta de desarrollo profesional.
  • Monotonía en el puesto de trabajo.
  • Jornadas de estrés y exceso en la carga de trabajo.
  • Mala relación con los compañeros.
  • Falta de comunicación.
  • Ausencia de reconocimiento.

Estos factores extrínsecos pueden acabar desembocando en el síndrome de Boreout. Se trata de un trastorno de complicado diagnóstico cuyos síntomas pueden relacionarse con los de una depresión, un trastorno obsesivo compulsivo o una etapa de duelo. Es en estos momentos de dificultad cuando contar con un liderazgo potente en la empresa puede revertir el ánimo del empleado y dar un giro de 180º a su situación .

La importancia de un líder fuerte

El papel del líder va mucho más allá de la dirección de proyectos, tiene un gran componente humano. Como responsable de un grupo, puede ver cómo su equipo consigue los objetivos, pero si descuida el lado personal de las relaciones laborales, ¿puede considerarse un buen líder?

A la larga, si un empleado no está contento en su puesto acabará por marcharse de la compañía y el equipo de trabajo que cumplía con los objetivos propuestos se irá desmantelando poco a poco. Para evitar esto, un buen líder puede poner en práctica varias iniciativas para fidelizar al talento que van mucho más allá de la simple remuneración económica.

Tipos de motivación laboral

Podemos distinguir diversos tipos de motivación laboral que agrupamos bajo dos categorías: la motivación intrínseca y la motivación extrínseca. Ambos tipos nos acercan a lograr nuestros objetivos.

  • Motivación intrínseca: es aquella que no necesita recibir un estímulo externo, es decir, por parte de un tercero. Está estrechamente relacionada con nuestro nivel de satisfacción personal. Por ejemplo, cuando realizamos una determinada tarea por la satisfacción propia de hacerlo, no existe un incentivo o recompensa externa simplemente el deseo de superarnos o seguir aprendiendo y formándonos.
  • Motivación extrínseca: viene de fuera, estimulada por un tercero. Se asocia al deseo de recibir una recompensa externa como por ejemplo, un premio, un ascenso o contar con la aprobación y reconocimiento del entorno.

Cómo motivar a los empleados

Un aumento de sueldo, así como un bonus ocasional, solo supondrán un pequeño plus momentáneo en la moral del profesional que se diluirá rápidamente, pues aquello que le provoca malestar seguirá presente en su día a día. Para evitar esto, estas son algunas de las estrategias que las organizaciones pueden poner en práctica para mantener la motivación a largo plazo:

  1. Definir la labor y el rol de cada profesional dentro de la compañía.
  2. Proveer al empleado de los recursos necesarios para que pueda desempeñar satisfactoriamente su actividad.
  3. Promover programas dirigidos a la mejoría del control emocional y la resolución de problemas.
  4. Facilitar la formación y la información.
  5. Fomentar la flexibilidad y favorecer la conciliación.
  6. Promover la participación de los trabajadores en la organización y mejorar las redes de comunicación.
  7. Incentivar el trabajo en equipo para mejorar el clima de trabajo.

Técnicas de motivación laboral

Para garantizar el éxito de una organización es necesario que esta esté formada por empleados satisfechos y motivados. Para ello, la empresa debe implementar técnicas de motivación laboral como por ejemplo, la opción de promocionar dentro de la empresa, flexibilidad y conciliación, trabajo en equipo, transparencia en las comunicaciones… A continuación te contamos algunas de las más destacadas:

Team building

Que exista un buen clima laboral es uno de los puntos más importantes para que los profesionales se sientan cómodos en la oficina. Pasamos buena parte de nuestro día a día en el puesto de trabajo, relacionándonos con personas que no hemos elegido, al contrario de lo que ocurre en la esfera privada.

La empresa tiene la responsabilidad de poner en marcha las iniciativas y actividades necesarias, si fuera el caso, para facilitar un clima laboral sano y agradable. Apostar por el Team Building, puede aportar incontables beneficios para la empresa como por ejemplo: incentivar el autoconocimiento, las fortalezas y debilidades de uno mismo o mejora de la comunicación entre los empleados y los diferentes departamentos.

El Team y el Bridge Building son muy parecidos, ya que el fin de ambos es el de crear un equipo más unido mediante las relaciones entre los trabajadores de todos los departamentos. La mayor diferencia entre ellos es que con el primero se intenta fomentar la relación de los empleados fuera de la empresa mediante actividades, mientras que con el Bridge Building se establecen zonas dentro del espacio de trabajo donde los profesionales pueden relacionarse y establecer una comunicación interdepartamental.

Escucha activa

Una de las técnicas más destacadas y que mejor funcionan para lograr que un empleado se sienta mejor valorado y más motivado y, por ende, sea más proactivo y se implique más en sus tareas, es practicar y potenciar la escucha activa en el entorno laboral.

Existen varias palancas para lograr el compromiso o engagement de los empleados, pero una de las que mejor funciona es la escucha activa por parte de sus superiores. Acercar posturas entre empleado y manager puede ser beneficioso para ambas partes.

Reconocimiento

Otra de las técnicas de motivación laboral que ayudará a que exista un buen clima laboral y que aumente la motivación de los trabajadores es el reconocimiento. Esta técnica genera un impacto muy positivo sobre los trabajadores gracias al reconocimiento personalizado y felicitación por parte de sus responsables por un trabajo bien hecho.

Evita la rotación

Existen varios factores que pueden ayudar a disminuir la rotación de personal en una empresa. El clima laboral, la correcta adecuación al puesto de trabajo o la posibilidad de trazar un plan de carrera dentro de la empresa son algunos de ellos. Para esto, también es importante contar con una estrategia de employer branding que permita que la empresa se identifique como una empresa atractiva y fidelice al talento.

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