Vuelven el employer branding y la «guerra por el talento»

Las condiciones económicas, la seguridad laboral a largo plazo, perspectivas de futuro, un ambiente de trabajo agradable, una buena conciliación entre la vida laboral y personal y desarrollar un trabajo interesante.

Pero ¿qué interés tiene hoy en día para una compañía tener un gran atractivo como empleador? ¿En qué le beneficia?

Parecía que habían perdido vigencia conceptos como employer branding​

Precisamente, parecía que durante los últimos años de crisis económica habían perdido vigencia conceptos como employer branding y muchos otros asociados a la selección y la contratación que habían sido una constante en la década anterior, como es el caso de la tan famosa en el pasado “guerra por el talento”.

Pero los datos sobre compromiso laboral de los españoles y desajuste entre oferta y demanda en el mercado laboral vuelven a poner estos temas sobre la mesa.

En estos momentos, en que se percibe ya una cierta reactivación de la economía, en la mayoría de economías occidentales se da la paradoja de que altas cifras de desempleo conviven con dificultades para cubrir las vacantes disponibles, sobre todo en sectores como la tecnología.

A estas dificultades para encontrar trabajadores con el perfil que las empresas necesitan (según cifras del instituto Nacional de Estadística, en España hay casi 73.000 vacantes no cubiertas), se une una segunda problemática derivada de los años de ajustes de plantillas: una evidente erosión del compromiso de los profesionales con su trabajo/empresa. De hecho, el 12% de los trabajadores españoles asegura estar ya en búsqueda activa​ de un nuevo empleo

Es de esperar que, en este nuevo contexto, las empresas que se hayan olvidado de su employer branding en los últimos ejercicios tengan que volver a centrar esfuerzos en su estrategia de atracción y de fidelización de candidatos.

En ese caso, tienen que saber que lo que más valoran en la actualidad los trabajadores españoles, según el Informe de Randstad sobre employer branding​, son las condiciones económicas, por encima de la seguridad laboral y las perspectivas de futuro. Este dato refleja el contexto económico del país con precisión, ya que en los últimos años, de incertidumbre económica y laboral, la seguridad en el empleo venía siendo la prioridad para la mayoría de los españoles.

Lo que más valoran en la actualidad los trabajadores españoles son las condiciones económicas.

En cuanto a los valores “simbólicos” o abstractos, los principales atractivos de un empleador para los trabajadores son la honradez, la fiabilidad, la sinceridad, la inteligencia y la seguridad. Y, por sectores, las mujeres se sienten atraídas por los medios de comunicación y los hombres, por las empresas de tecnología y electrónica.

El Informe de Randstad sobre employer branding, que este año se ha realizado en España por quinto año consecutivo, se basa en una muestra de más de 8.000 encuestas a trabajadores de entre 18 y 65 años. La encuesta mide su percepción sobre los 165 empleadores más importantes del país. A nivel mundial, el estudio sondea la opinión de más de 200.000 personas de 23 países, que cubren el 75% de la economía mundial.

En todo el mundo, se registra un aumento del 4% del atractivo de los empleadores. Este incremento podría deberse a un mayor optimismo de los trabajadores debido a la reactivación económica.

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