contingencias comunes: cómo afectan al empleado y a la empresa

 

Las contingencias comunes forman parte de la actividad laboral, tanto para las empresas como para los trabajadores. A lo largo de nuestra vida pueden surgir situaciones, accidentes o enfermedades que nos impiden desarrollar nuestro trabajo y que, por ley, están cubiertas para garantizar la continuidad de nuestro contrato laboral y poder seguir percibiendo un salario.

A continuación, desde Randstad, te explicamos qué son y cómo funcionan. Para que tanto si eres trabajador como si formas parte de Recursos Humanos de una empresa, puedas tener claros todos los conceptos.

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¿qué son las contingencias comunes?

Las contingencias comunes son todas aquellas situaciones que hacen que los trabajadores deban ausentarse de sus puestos de trabajo pero que no han sido provocadas por la actividad laboral que desarrollan en su día a día. Es decir, todo aquello que sucede fuera del entorno laboral, o enfermedades que no tienen nada que ver con el trabajo.

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tipos de contingencias comunes

La Seguridad Social tiene establecidas diferentes tipos de contingencias comunes, por ejemplo:

  • Incapacidad temporal
  • Incapacidad permanente no causada por una enfermedad laboral o accidente de trabajo
  • Maternidad
  • Paternidad
  • Embarazo de riesgo
  • Enfermedades comunes
  • Muerte y supervivencia por enfermedad común
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prestaciones que cubren las contingencias comunes

Las prestaciones que cubren las contingencias comunes derivan de la atención médica que se brinda a través de los Servicios Públicos de Salud ante cualquier situación que no sea consecuencia de la actividad laboral realizada.

Además, económicamente el empleado percibe un subsidio con el que se compensa la pérdida de ingresos por el tiempo que no puede trabajar, que corre a cargo del Instituto Nacional de la Seguridad Social y las Mutuas que colaboran con la Seguridad Social.

El empleado en situación de baja por contingencias comunes debe estar afiliado a la Seguridad Social, en régimen general y dado de alta. Y haber trabajado un mínimo de 180 días en los 5 años anteriores a su nueva situación para poder percibir la prestación económica.

En base a estos requisitos, el subsidio económico por incapacidad temporal debido a contingencia común comienza a cobrarse a partir del cuarto día de la baja médica. Y el cuarto y el decimoquinto día, es la empresa quien debe hacerse cargo de la cantidad económica que le corresponde percibir al empleado. A partir del decimosexto día, la responsabilidad recae en el INSS o la mutua.

La cantidad se desglosa del siguiente modo: el 60% de la base reguladora desde el cuarto día hasta el vigésimo, y del 75% a partir del día 21 en adelante.

Es importante tener en cuenta que la duración máxima en la que un trabajador puede estar de baja por contingencia común es de 12 meses, con posibilidad de prórroga por otros 6 meses, es decir, 18 meses en total para que la curación sea posible.

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¿cómo se calcula la base de cotización por contingencias comunes?

Para saber cómo calcular la cotización por contingencias comunes, se deben sumar los elementos salariales, sin tener en cuenta complementos extrasalariales tales como las dietas, los kilómetros o las horas extras.

Al resultado de esta suma, se debe incluir la parte proporcional de las pagas extras, independientemente de si están prorrateadas o no.

Una vez se obtiene el resultado, es el momento de multiplicar el total por el 4.47% del salario bruto, determinando así la cotización por contingencias comunes.

Pero hay que tener en cuenta otros criterios imprescindibles para poder llevar a cabo el cálculo correcto. Por ejemplo, si el resultado es inferior a lo establecido por el convenio para el puesto y la categoría profesional del trabajador, se aplicará la base de cotización mínima y, en el caso de que se supere  este límite, se utilizará la base máxima de acuerdo con la legislación vigente.

Para los contratos a tiempo parcial, es necesario realizar una estimación de las contingencias comunes basada en las horas de contrato y, en el caso de la base de cotización por accidente, muerte o supervivencia, las consideraciones varían según las circunstancias.

En las situaciones de fallecimiento por enfermedad común o accidente no laboral, la base reguladora se obtiene sumando las bases de cotización de 24 meses seleccionados entre los últimos 15 años, y dividiendo el resultado por 28. Y, para casos de muerte por accidente de trabajo o enfermedad profesional, se suma el salario diario en la fecha del incidente o baja, se multiplica por 365 días, se añaden pagas extras, beneficios, pluses y retribuciones complementarias, y el resultado se multiplica por el número de días trabajados, se divide por 12 y se multiplica por 273.

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diferencias entre contingencias profesionales y comunes

Como hemos dicho, las contingencias comunes no son consecuencia de la actividad laboral que desarrolla el empleado. Mientras que las contingencias profesionales están estrechamente ligadas a las consecuencias ocurridas mientras se desarrolla el trabajo, derivando de accidentes de trabajo o enfermedades profesionales.

Además, la cotización de los subsidios se calcula de diferente forma y, en vez de ser la Seguridad Social quien se hace cargo del proceso, tanto económicamente como médicamente, es la mutua quien lo hace.

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¿quién paga las contingencias comunes?

Como hemos explicado en apartados anteriores, en función del número de días de baja es la empresa quien debe hacerse cargo y, posteriormente, la Seguridad Social.

Es posible que, según el convenio que tiene adscrito cada empresa, ésta esté obligada a compensar la diferencia salarial en base a los establecido.

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novedades introducidas en el año 2023

Durante el año 2023, se introdujeron algunas novedades que influyen en las contingencias comunes.

Algunas de ellas son:

  • Se reconoce como contingencia común la situación de menstruación incapacitante.
  • Se reconoce como contingencia común la situación de interrupción del embarazo, tanto de forma voluntaria como involuntaria.
  • A partir del primer día de la semana 39 de embarazo, se reconoce la baja médica por contingencia común.

Además, en estos casos la retribución salarial se contará desde el primer día, y no desde el 4. Y no será abonada por la Seguridad Social ni se determinará un plazo concreto para su finalización.

Otra de las novedades más importantes es el sistema de tramitación de las bajas médicas, los partes de confirmación y el alta médica. A partir de ahora el trabajador tendrá una copia de todos ellos, pero no será el encargado de facilitarlos a la empresa, sino que será el propio servicio médico quien lo haga.

 

Como ves, en el año 2023 se llevaron a cabo modificaciones en cuanto a las contingencias comunes y, pese a que te hemos explicado algunas de ellas, es importante que las conozcas todas para que puedas verificar que los trámites se están realizando correctamente.

Tanto empresa como trabajador deben de ser conscientes de cómo funcionan las contingencias comunes por si, a lo largo de su trayectoria, se ven inmersos en alguna de ellas.