jefe de cocina.

Las principales tareas de un jefe de cocina son:

• diseñar menús: estudiarás las últimas tendencias en restauración para ofrecer a los clientes los platos más novedosos. Buscarás los mejores ingredientes para cada receta y crearás todo tipo de menús, desde desayunos y almuerzos hasta cartas de bebidas. También estudiarás tus recetas con diferentes ingredientes para garantizar los resultados deseados. 
• preparar y cocinar platos: tus habilidades culinarias facilitarán la preparación de todo el menú, desde los entrantes hasta los postres. Tu trabajo consistirá en garantizar una presentación atractiva y un sabor delicioso que sorprenda a los comensales. Todas las propuestas deberán estar bien emplatadas y ofrecer un aspecto apetecible. En resumen, serás el responsable de las guarniciones y la presentación de los platos. 
• coordinar las actividades de la cocina: te encargarás de la gestión de todo lo que sucede en tu cocina. Esto exige un importante trabajo de coordinación entre todos los miembros del equipo para garantizar que los platos se preparan conforme a unos estándares. Asimismo, te encargarás de planificar el calendario de trabajo para los cocineros y el personal de limpieza. 
• desarrollar funciones administrativas: la realización de pedidos de ingredientes, la gestión de la despensa y la búsqueda de proveedores serán algunas de las funciones administrativas que desempeñarás como jefe de cocina. Esto también incluye velar por la seguridad y la higiene en la cocina. Por otro lado, los costes de cada plato y los precios del menú también dependerán de las decisiones que tomes.

Como jefe de cocina, trabajarás en cualquier sector de negocio en el que se sirva comida, como restaurantes, hoteles, bares o cruceros. También tendrás la oportunidad de trabajar en empresas de catering y banquetes. Así, el entorno de trabajo dependerá en gran medida de quién sea tu empleador. Lo más habitual es trabajar en interiores y siempre con un ritmo de trabajo alto, tanto si se trata de un café como del restaurante de un hotel. Por lo general, este puesto de trabajo implica muy pocos desplazamientos, a menos que trabajes en un food truck o para una empresa de catering y servicios de banquetes. En cualquier caso, se espera que vistas el uniforme característico de un chef, que normalmente incluye un gorro alto en forma de cilindro, denominado toque blanche.

Dependiendo de la empresa y del sector para el que trabajes, entre tus compañeros encontrarás cocineros, pinches, planchistas, auxiliares de cocina, reposteros, etc. También trabajarás de cerca con baristas y gerentes de cafetería, así como con otros especialistas, entre los que se incluyen recepcionistas, camareros, freganchines y directores de eventos.

Puesto que hoteles y restaurantes abren a diario, un jefe de cocina trabaja a lo largo de toda la semana, incluidos fines de semana y festivos. Como en cualquier otro empleo, tendrás derecho a tus días de descanso semanales (dos días sin interrupción), así como a un descanso de 20 minutos en jornada continuada y de al menos hora y media en jornada partida. En este último caso, lo habitual es que los turnos tengan una duración máxima de cinco horas y una mínima de tres. No obstante, hay que destacar que los convenios de cada comunidad autónoma pueden introducir matices en la norma general. La mayoría de las contrataciones se realizan a tiempo completo, pero también hay opciones de media jornada y contratos por obra y servicio, sobre todo en el sector del catering para eventos.

La carrera profesional en la cocina comienza con un puesto como aprendiz o chef de línea. Tras trabajar bajo la supervisión de otros jefes de cocina, ascenderás a posiciones superiores como la de jefe de partida (chef de partie), segundo en cocina (sous chef) y finalmente chef ejecutivo (chef de cuisine). Cuando hayas acumulado la experiencia suficiente, tendrás la opción de trabajar como primer jefe de cocina en un gran restaurante. Otra alternativa de promoción profesional es convertirte en director de cocina o de restaurante. Incluso podrás plantearte abrir tu propio restaurante o pastelería. 

Encontrar un trabajo de jefe de cocina en Randstad te ofrece importantes ventajas:

• una amplia variedad de oportunidades de formación y crecimiento 
• una persona de contacto con experiencia para ayudarte cuando sea necesario
• amplias oportunidades en tu área de trabajo
• remuneración semanal o mensual, en función del puesto de empleo
• contratos temporales e indefinidos

¿Quieres un contrato indefinido? Los contratos temporales de jefe de cocina a menudo son el primer paso para obtener un puesto de trabajo fijo. Cada año, miles de personas consiguen un contrato indefinido gracias a los trabajos temporales que encontraron a través de Randstad. Además, ¡muchas empresas también contratan a trabajadores indefinidos a través de Randstad!