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Ya hemos hablado y destacado la importancia del employer branding en multitud de ocasiones, pero… ¿y en momentos de crisis o de dificultades socioeconómicas? ¿Podemos seguir trabajando en este aspecto? No solo podemos, ¡debemos hacerlo!

El employer branding, recordemos, se basa en los valores que una empresa proyecta hacia el exterior, es la idea que los trabajadores, actuales y potenciales, tienen de ella. De esta visión dependerán muchos factores esenciales en el funcionamiento y éxito de la organización, como puede ser la productividad de los empleados, el clima laboral, el estrés o satisfacción en el trabajo, o la capacidad de contratación que tenga la propia empresa.

Siempre es importante proyectar una buena imagen de nuestra empresa u organización, pero es en situaciones complejas como la actual, en la que vivimos una incertidumbre constante debido a la crisis del COVID-19, donde es más importante. No solo los trabajadores, sino también el resto de la sociedad tienen puestos los ojos en nuestra forma de actuar. Causar buena impresión y sacar a relucir nuestros valores empresariales puede ser determinante para afrontar la crisis y salir reforzados en el futuro.

¿Cómo es la situación de las empresas en la actualidad?

Según Randstad Research, el 42,8 % de las empresas mantiene su actividad a pesar de la crisis del COVID-19, aunque otras también han optado por la paralización temporal (25,5%) o la reducción de actividad (22,3%), que en su mayoría (56 %), ha sido inferior al 60 %.

“A pesar de las consecuencias que esta terrible situación supone para la economía y el empleo en nuestro país, es significativo señalar que el 42,8 % de nuestras empresas están buscando fórmulas (como el recurso al teletrabajo, cuando éste es posible) para intentar mantener su actividad y evitar así pérdidas significativas de negocio y que tan solo el 1,2 % ha tenido que cerrar de manera definitiva. Los impactos, lógicamente, varían mucho de un sector a otro. Esto se traduce que, a grandes rasgos, la flexibilidad organizativa y laboral está funcionando, aunque los efectos se agravarán, sin duda, cuanto más se prolongue la crisis”, asegura Valentín Bote, director de Randstad Research.

El mismo estudio de Randstad también revela de qué manera ha afectado el COVID-19 directamente a la plantilla: el 14,7 % de las compañías han tenido algún caso, no suponiendo ningún tipo de impacto negativo en el 75,8 %.

3 beneficios de mantener un buen employer branding de cara a la nueva normalidad

Como podemos ver, las marcas y el cómo las percibe la sociedad ya no se construyen a partir de su propio discurso, sino de experiencias personales de los consumidores, trabajadores y clientes.

Es ante una crisis, independientemente del carácter de ésta, donde más importante es el cuidado y mantenimiento de una buena política de employer branding debido a los numerosos beneficios que aporta.

  1. Atracción, fidelización y aumento del compromiso de los empleados. Al tener una buena estrategia de employer branding estás trasmitiendo un mensaje de seguridad y optimismo hacia el exterior, dando a conocer todos lo beneficios que supone trabajar y ser parte de tu empresa.
  2. Aumento del prestigio y mejora de la imagen de la empresa. Contar con embajadores de marca hace que éstos hablen de manera positiva de la empresa para la que trabajan, lo que permitirá aumentar y potenciar su prestigio e imagen.
  3. Diferénciate de tu competencia. En la actualidad, no solo cuenta el producto o servicio que ofreces, sino también los valores, la cultura, el ambiente de trabajo o el trato que los trabajadores reciben. Por ello, mantener una buena estrategia de gestión en este sentido hará que los consumidores y clientes se decanten antes por tu empresa que por alguna de las de la competencia.

¿Cómo podemos gestionar una política de employer branding efectiva ante una situación de crisis?

Ante una crisis social y económica como la que estamos viviendo en la actualidad a causa del COVID-19, debemos tener sumo cuidado no solo con las consecuencias económicas, sino también con las reputacionales.

  1. Anticípate a los hechos. Prevenir es mejor que curar, por ello, anticiparte y tener muy presentes los distintos escenarios que se puedan plantear será de vital importancia para poder actuar en consecuencia, frenando el posible impacto negativo.
  2. Mantén una buena comunicación interna y externa. Informar sobre la situación de la empresa y de todo aquello que afecte a los trabajadores, tanto de manera directa como indirecta, es la base de la transparencia.
  3. Aprende a actuar de manera rápida y eficaz. Puede que existan momentos en los que surjan críticas o acciones contra tu empresa, por ello debemos de conocerlas (a través de, por ejemplo, monitorizaciones en redes), estudiarlas y actuar en consecuencia, asumiendo errores o desmintiendo falsedades.
  4. No generalices, conoce a tus trabajadores y estudia cada caso. Puede que no todas las medidas sean efectivas en todos los casos, conocer cada caso en particular nos hará ser mucho más cercanos para con nuestros empleados, transmitiéndoles confianza, interés y cercanía.
  5. Ofrece una forma fácil de contacto y no olvides que el diálogo es fundamental. El talento es la base y el reflejo de nuestra empresa, por lo que si no sabemos qué piensan de ella, difícilmente sabremos cómo debemos actuar. Escucha a tus profesionales de forma activa y ten siempre en cuenta sus aportaciones.

 

La crisis del Covid-19 ha generado un escenario nuevo para todas las empresas y ha supuesto una prueba para ellas y su employer branding.

Por un lado, nos podemos encontrar con empresas que se han visto obligadas a reducir su plantilla y bajar su actividad y, por otro, empresas que han tenido que hacer un esfuerzo extra y reforzar el personal, como las destinadas a los sectores sanitarios o de alimentación.

Vivimos un momento único en la historia, la crisis del COVID-19 tiene un impacto en las marcas corporativas y empleadoras, pero la forma en que se perciben estas acciones variará según se ejecute y comunique. Los líderes deben recordar que su identidad y sus promesas deben mantenerse a pesar de las difíciles decisiones que deban tomar.

¿Necesitas ayuda para mejorar tu employer branding?