reducción de jornada


Dos aspectos clave en relación a la vida laboral tienen que ver con el tiempo y con el dinero. En este post nos dedicaremos al primer punto, pero en relación con el segundo. Hablaremos de cómo se puede gestionar la
reducción de jornada en contrato indefinido y aspectos relacionados con la reducción de jornada y sueldo.

Porque esta cuestión impele cada día a más trabajadores y surgen cuestiones como cuánto tiempo puede durar la reducción de jornada o si es posible acogerse a una reducción de jornada voluntaria sin motivo. 

Sigue leyendo si eres un trabajador afectado por esta cuestión, pero también un directivo o responsable de recursos humanos para conocer cómo afecta a la empresa la reducción de jornada. 

Pero, antes que nada, definamos de manera clara los conceptos.

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¿qué es la reducción de la jornada laboral?

También conocida como jornada (de trabajo) reducida, se trata de una medida que disminuye las horas que el trabajador debe desempeñar en un día, y que pueden oscilar entre el 10 y 70% del tiempo habitual de trabajo (esto se puede calcular sobre una base diaria, semanal, mensual o anual, según cada caso).

Según el Estatuto de los Trabajadores, la reducción de jornada laboral es un derecho del que pueden disfrutar los trabajadores, tal como se recoge en el artículo 37.5 de dicho documento. Se trata de una solicitud para modificar la cuantía de horas que el trabajador dedica a la empresa, y normalmente se pide por cuestiones relacionadas con la conciliación familiar

Para otras razones, como ampliar estudios, el Estatuto de los Trabajadores no recoge esa posibilidad, aunque es posible que determinadas reducciones de jornadas voluntarias, sin alegar un motivo claro, sean estudiadas y aceptadas por los responsables correspondientes.

La reducción de jornada, en la mayoría de los casos, implicará reducción de salario proporcional a las horas que se dejan de trabajar.

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tipos de reducciones de jornada más frecuentes

por maternidad, paternidad o cuidado de hijos

Tanto padres como madres pueden solicitar la reducción de jornada (con una disminución proporcional de su salario) para atender a un hijo de menor de 12 años que así lo requiriera. Esta circunstancia puede darse por una enfermedad repentina del menor, por ausencia de cuidadores durante las vacaciones de verano u otros periodos festivos o por otro tipo de razones personales. 

Y, claro está, por nacimiento de un bebé y la posterior crianza. En este caso, no hablamos ya de una reducción jornada por cuidado familiar al uso, sino de una reducción de jornada por maternidad o paternidad que se da durante el periodo de lactancia, es decir, hasta que el hijo o la hija cumpla nueve meses. Durante este tiempo, los trabajadores pueden reducir su jornada en una hora, cada día, sin perder un euro de su salario.  

Es distinto a la baja o permiso por maternidad y paternidad, que presenta otras condiciones. Normalmente, la reducción de jornada se emplea como una extensión de la baja por maternidad o paternidad, una vez se ha agotado el uso de este derecho y la criatura cuenta con más meses.

por estudios

Como se ha dicho, el Estatuto del Trabajador no contempla que los estudios constituyan un motivo suficiente como para justificar la reducción de jornada, pero sí se pueden pedir permisos puntuales para asistir a exámenes o cuestiones relacionadas con la vida académica, pero esto no entra en la política de reducción de jornada.

por cuidado de un familiar o de mayores

Existe el derecho a reducir la jornada para cuidar a un pariente, sea anciano o no, siempre que estén en situación de dependencia ni se encuentren realizando ningún trabajo retribuido. 

En este caso, una vez aprobada la reducción de jornada, se puede disfrutar durante el tiempo que sea necesario, sin límite.  

por guarda legal

Si alguien tiene la custodia de un menor o de una persona incapacitada, es decir, su guarda legal, también se puede solicitar la reducción de jornada. 

voluntaria sin motivo

En este punto, existe cierta confusión, ya que la norma impide pedirla ciertos supuestos (ampliación de estudios), pero sin embargo permite solicitarla sin motivo alguno. Lo que puede dar lugar a que se emplee, por ejemplo, para esos estudios (causa noble, por otro parte). 

Como en todo, si bien la ley sirve de marco, el trabajador siempre podrá negociar con el departamento de recursos humanos una reducción de jornada, en el tiempo que también se establezca, sin alegar ninguno de los motivos anteriormente descritos ni ningún otro. Ahora bien, la empresa podrá negarse si así lo quisiera, y el trabajador no podrá ampararse en la ley para acogerse a dicha reducción de jornada voluntaria sin una de las razones que contempla el Estatuto (guarda legal, maternidad, etc).

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cómo solicitar y plazos de la jornada reducida

Para pedir la reducción de jornada, hay que remitir un documento. Basta un simple correo electrónico al responsable de recursos humanos, alegando, si se considera oportuno, las razones que justifican la reducción de jornada, las horas que se quieren reducir y el tiempo que se quiere mantener esa jornada menguada. 

Es conveniente trasladar esa comunicación, con al menos quince días de antelación, para evitar trastornos en la empresa, y atenerse a las razones que permiten la reducción de jornada como un derecho. En ese caso, la empresa no se puede negar y, de hacerlo, se podría enfrentar a sanciones legales y que el trabajador, con la razón de su parte, les demandara. 

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horario y salario del empleado en la jornada laboral reducida

El horario nuevo que sobreviene tras acordar la jornada laboral debe ser pactado con la empresa y la nueva jornada (reducida) no podrá ser inferior a la mitad de una jornada normal, y el mínimo reductible es de un octavo (si se trabajan ocho horas al día, se reduciría una hora). 

El salario base, ya con la jornada reducida, se recalcula de manera proporcional a las horas ‘suprimidas’. Si la jornada se reduce un 20% en tiempo, se reducirá, asimismo, un 20% en salario.

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¿cuánto tiempo puede durar la reducción de jornada?

Según los distintos supuestos, la reducción de jornada se puede ampliar más o menos, habiendo algunos casos en que no hay límite temporal. En caso de jornadas reducidas voluntarias, el tiempo se pactará entre la empresa y el trabajador. Si se debe a una enfermedad del trabajador, el máximo son dos años, mientras que si se solicita para cuidar a una persona enferma o dependiente, no hay límite de casos. 

Para demás casuística, se puede consultar lo publicado al respecto en el Ministerio de Trabajo.

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¿cómo afecta a la empresa la reducción de jornada?

En cuanto al salario, la reducción de jornada implica reducción en gastos de personal, pero también una reducción en fuerza de trabajo que puede afectar a la productividad general de la empresa. De ahí que, durante el tiempo de trabajo, se deba maximizar el rendimiento.

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preguntas frecuentes