claves del reskilling

 

Cuando los negocios y el mundo laboral parecen estar cambiando más rápido que nunca, es esencial estar preparados para el futuro invirtiendo en el desarrollo de habilidades.

Una gestión dinámica del talento debe contemplar formas de garantizar un desarrollo laboral continuo, incluyendo el reskilling. Reciclar laboralmente al talento implica capacitar y redirigir a los empleados a nuevos puestos dentro de la empresa, lo que hará que sea más resistente y adaptable a los cambios. Mantener a los trabajadores actuales para llenar las brechas de empleo futuras es una estrategia rentable que fomenta el compromiso y la fidelización de los empleados.

Veamos algunas de las razones por las que el reskilling podría resultar crucial para la empresa y cuáles son las claves para implementar con éxito los programas.

1

¿por qué el reskilling es crucial para la empresa?

Implementar planes de reskilling ya no es opcional: se ha convertido en una necesidad estratégica para que las organizaciones se mantengan competitivas, flexibles y capaces de adaptarse rápidamente a los cambios.

reskilling en habilidades de creciente demanda

Las empresas siempre han necesitado habilidades destacadas y aplicables en sus equipos para tener éxito. La diferencia hoy en día son los desafíos generados por los desarrollos tecnológicos, que han creado un conjunto de habilidades completamente nuevas y muy demandadas. 

Con esta nueva demanda de conjuntos de habilidades también se produce un cambio en las expectativas del talento, ya que cada generación de trabajadores aporta sus respectivas motivaciones y ambiciones.

Según el World Economic Forum, que se reúne cada año para discutir las tendencias mundiales en economía, tecnologías y sociología, la automatización hará desaparecer 85 millones de puestos de trabajo para 2025. Al mismo tiempo, creará 97 millones de nuevos puestos para personas con las habilidades adecuadas. Para ocupar estos empleos, las empresas deberán volver a capacitar a sus empleados actuales para estar al día con los avances de cada industria.

Las habilidades digitales, como análisis de datos, inteligencia artificial, automatización, junto con las soft skills (adaptabilidad, creatividad, pensamiento crítico) están disparándose en importancia.

Las empresas que invierten en reskilling en estas áreas logran cerrar brechas de competencias, reducir la dependencia de contratación externa y mejorar su capacidad para innovar.

Veamos algunos perfiles con una demanda creciente de recapacitación profesional:

Si bien los campos emergentes pueden dictar la necesidad de un conjunto específico de hard skills, no hay que pasar por alto la necesidad de volver a capacitar al talento en soft skills.

Por ejemplo, el World Economic Forum predijo que el pensamiento analítico, la creatividad y la flexibilidad estarán entre las habilidades más demandadas para 2025. Otras soft skills muy valoradas serían:

  • alfabetización digital y de datos
  • inteligencia emocional
  • trabajo en equipo
  • gestión del tiempo
  • actitud positiva hacia el aprendizaje

El reskilling tanto de las hard skills como de las soft skills es clave para preparar al talento y la organización para los cambios y los desafíos del futuro.

el reskilling en la automatización de procesos

La automatización avanza en muchos sectores. Procesos rutinarios o manuales están siendo reemplazados o asistidos por tecnología. Cuando esto sucede, bastantes puestos se transforman o desaparecen y otros nuevos emergen.

El reskilling permite que los trabajadores cuya función original se ve impactada puedan reciclarse en nuevas funciones más tecnológicas o de supervisión, mantenimiento, monitoreo, etc. De esta forma, la empresa amortigua el impacto del cambio tecnológico, evita redundancias y retiene talento interno que ya conoce la cultura y los procesos.

2

estrategias para un reskilling exitoso

Para que el reskilling funcione, debe integrarse con visión, método y constancia. Estas claves ayudan a diseñar un plan eficaz.

reskilling como parte del desarrollo profesional

El reskilling debe verse como un componente del crecimiento profesional de los empleados, no como una medida reactiva ante desajustes. Incluirlo en los planes de carrera mejora la motivación y el compromiso del personal.

Cuando los trabajadores perciben que la empresa invierte en su futuro, aumenta su fidelidad, reduciendo la rotación de personal.

analizar las habilidades actuales

Para asegurarse de que el programa de reskilling es relevante y productivo, hay que tener una idea clara de la situación competencial actual de los equipos. Puede ser útil realizar una investigación específica sobre las habilidades y la experiencia dominantes en el sector e identificar posibles brechas de habilidades en el futuro.

Este tipo de análisis de habilidades proporciona una mejor comprensión del conjunto de habilidades existentes en comparación con las habilidades necesarias. Esta comparación puede ayudar a la empresa a identificar posibles brechas de habilidades, como las digitales, que podrían resultar problemáticas en el futuro.

identificar tendencias en el mercado

Conocer hacia dónde se dirige el mercado, qué tecnologías emergen, qué competencias serán esenciales permite anticiparse. No se trata solo de reaccionar tarde.

Por ejemplo, sectores como digitalización, automatización, inteligencia artificial, sostenibilidad, necesitan perfiles adaptados. Tener ojo en esas tendencias permite proyectar qué funciones nuevas serán necesarias y preparar al talento interno para ellas.

3

desafíos dentro del reskilling

Aunque tiene muchas ventajas, el camino tiene obstáculos. Ser consciente de ellos permite anticiparse y superarlos.

aprendizaje como prioridad

Asignar tiempo, recursos y motivación al aprendizaje es clave. Si la formación se ve como algo extra o voluntario sin respaldo real, termina quedando relegada. Las empresas deben integrar el aprendizaje continuo en la rutina de trabajo.

También importa la cultura interna: debe valorarse equivocarse, probar, innovar, no penalizar el error, para que la gente esté dispuesta a cambiar de rol, de habilidades, salir de su zona de confort.

probar e iterar

Las pruebas e iteraciones continuas pueden ayudar a garantizar que la formación y el reskilling del talento esté en constante evolución, mejorando y respondiendo a los últimos desarrollos relevantes para cada negocio e industria.

Se puede evaluar el funcionamiento de los programas recopilando comentarios de los participantes e invitando sugerencias sobre qué mejoras se podrían realizar en el futuro.

presupuestos del reskilling

El reskilling no debe verse simplemente como algo excepcional o como una respuesta a corto plazo a un desafío único, como una transformación digital o un nuevo proyecto, sino como un proceso continuo que forma parte de la cultura de la empresa.

Por lo tanto, es importante asegurarse de que el presupuesto que se dedica a este proceso se mantenga a largo plazo. Esto puede requerir la presentación de un case study de éxito para poner el valor el reskilling, otra razón por la que es tan crucial recopilar datos de manera constante y analizar su impacto.

Al proporcionar evidencia clara y rica en datos de cómo el reskilling beneficia al negocio, puede convertirse en una parte fundamental de la estrategia de la organización. Algo que ayudará a la prosperidad de la empresa y de sus empleados, independientemente de cómo cambie el mundo laboral en los próximos años.

 

Al final, no se trata solo de adaptarse al mercado (que también), sino de dar a las personas la oportunidad de crecer, reinventarse y seguir sumando desde donde más valor aportan.

Formar talento interno para nuevos retos es una forma de decir: “confiamos en ti, vamos a por más juntos”. Y eso se nota en la motivación del equipo, en la agilidad del negocio y en la capacidad de hacer frente a lo que venga, con cabeza y corazón.

Apostar por el reskilling es apostar por un futuro más humano, más preparado y mucho más emocionante. ¿Nos ponemos en marcha?